Arcos con rueditas: Otra vez corren los postes

La costumbre de los alarmistas de correr hacia adelante la fecha de la catástrofe climática es notoria e hilarante. Desde 1988 vienen profetizando la llegada del Apocalipsis climático a 10 años de plazo. Pero cada año vuelven a correr los postes del arco y siguen pateando la pelota para adelante. Así nunca meterán un gol.

La nueva advertencia (con corrida del arco) viene, cuándo no! del UK MET Office, caballeros ingleses famosos por no haber acertado ni una sola de sus predicciones sobre el clima. Nos dicen:

El mundo tiene sólo 10 años para
controlar al calentamiento global.

La polución necesita ser controlada dentro de 10 años para detener el cambio climático glo-bal desbocado, según las últimas predicciones de la MET Office. […] “Para limitar el aumento de la temperatura media global a menos de 2ºC, ello implica que las emisiones de CO2 a la atmósfera deben caer a casi cero para el final del siglo.”

La gente que dirige el MET Office parece carecer totalmente del sentido del ridículo y la vergüenza –para no hablar de honestidad y decencia. Repasando la historia del absoluto fracaso de sus predicciones –y la de otros colegas en el campo del alarmismo climático al otro lado del Atlántico- uno no sabe si caerse al piso de la risa o encargarle a Al Qaeda que envíe a algunos de sus “bomberos suicidas” para que pongan en orden las cosas por allí.

Inconveniente Historia del Punto de No Retorno Ya para 1988 las Naciones Unidas nos estaban tratando de vender su “punto de no retorno”. Ver una página del Senado de los EEUU al respecto. Un extracto del informe dice:

“De acuerdo con un artículo en el Miami Herald del 5 de julio de 1989, el entonces director de la ofici-na del Programa para el Ambiente de las Naciones Unidas (UNEP), Noel Brown, advirtió que “hay una ventana de 10 años para la oportunidad de resolver” al calentamiento global. Según el artículo de 1989, “Un funcionario ambiental senior de las Naciones Unidas dice que naciones enteras podrían ser barridas de la faz de la Tierra por el ascenso del nivel de los mares si la tendencia al calentamiento global no es detenida para el año 2000. Las inundaciones costeras y el fracaso de las cosechas crea-rían un éxodo de eco-refugiados, amenazando con un caso político.” Ver aquí y aquí.

El científico de la NASA James Hansen ha estado advirtiendo durante décadas sobre el “punto de no retorno”. Los partes de prensa de la fecha hablaban de “Una severa advertencia de que el calentamiento global se está aproximando a un irreversible punto de no retorno”, dijo hoy James Hansen. Le llaman “tipping point”, o punto donde se pierde el equilibrio y uno cae al abismo. La terminología siempre es la misma, y lo mismo pasa con los tiempos verbales que son indefectiblemente el potencial y condicional: “Podría, sería posible, quizás, etc” y “si esto sigue así nos vamos todos al hoyo.” Recuerdo haber leído de niño libros Emilio Salgari sobre bandidos, piratas y asaltantes, pero nada comparable a estos profetas del Apocalipsis.

Hace pocos años el ex vicepresidente Al Gore inventó su propio reloj para el “tipping point”. Extracto del parte de prensa: “El ex vicepresidente Al gore vino a Washington el 17 de julio de 2009 para pronunciar otro discurso advirtiendo sobre la “crisis climática.” “Los más destacados expertos predicen que tene-mos menos de 10 años para hacer cambios dramáticos en nuestra polución de calentamiento global a menos de que perdamos nuestra capacidad de recuperarnos nunca más de esta crisis ambiental,” declaró Gore.

El papanatas heredero de la Corona Británica, Príncipe Charles, predijo un “tipping point” para julio de 2009.” Extracto: “El heredero al trono le dijo anoche a una audiencia de industriales y ecologistas en el Palacio Saint James que él había calculado que teníamos nada más que 96 meses para salvar al mundo.” Y en una ardiente acusación a la sociedad capitalista, Charles dijo que ya no podemos seguir costeándonos el lujo del consumismo y que le “era de la conveniencia” había terminado. Es fácil comprender por qué la pobre Lady Di se hartó del imbécil, y partió en busca de aires menos contaminados donde hubiese gente sin déficits neuronales.

Otro impresentable, el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon acortó todavía más la fecha del “tipping point” en agosto pasado, cuando advirtió de “incalculables sufrimientos si no hay un arreglo en la Cumbre del Clima en diciembre 2009!” Este personaje es famoso por confundir tiempo con clima y culpar al calentamiento global por el césped que crece en algunas islas de la Antártida (la “deschampia antarctica” desde hace varios millones de años). También mete la pata de continuo cuando habla del polo sur. Y todavía le pagan un suculento sueldo!

La revista Neewsweek también incursionó en el tema “tipping point” al escribir: “Mientras más se demoren los planificadores, mayores dificultades hallarán para tomar cuenta del cambio climático una vez que los resultados se hagan triste realidad.” Pero, Newsweek, ustedes ya citaron al “tipping point” en un artículo de Abril 28, 1975 diciendo que el mundo se iba de cabeza a una nueva edad de hielo! El periodismo sigue con la misma retórica, el mismo catastrofismo, la misma urgencia –pero con diferentes miedos ambientales. El negocio es vender la catástrofe. Nadie compra un diario o una revista cuyo titular dice: “Hoy no pasó nada grave en el mundo”.

Cambiantes vientos en el cambio climático

Gore es abucheado en una
presentación de su conferencia

El ex vicepresidente habló a una audiencia de unas 800 personas en el Anfiteatro Mizner Park sobre el cambio clmático. Más de 200 personas protestaban en las afueras, en la entrada del teatro y sus abucheos y cánticos se podían escuchar en la sala de con-ferencias cuando Gore comenzó su presentación. […] La presen-tadora de la conferencia, Marci Zarkoff, una eco-empresaria, dijo: “De modo que, en esencia, él es el presidente de la gente. Él es el Presidente del Planeta. Y el trabajo que está haciendo es más importante que cualquier otro trabajo que pueda hacerse.”

Los boletos para la entrada se vendieron entre $44 y $339, cuya recaudación va a la organización sin fines de lucro, Alianza para la Protección del clima, que preside Al Gore.

Por: Eduardo Ferreyra
Presidente de FAEC