Hallan un bidón con una sustancia tóxica

Un bidón de unos cinco litros con una sustancia supuestamente radiactiva en su interior inundó de temor ayer el barrio porteño de La Boca. Estudios posteriores realizados sobre el producto determinaron que perdió su toxicidad "porque tiene más de 25 años".

"Lo que se encontró en La Boca es un contenedor en el que se almacenan fuentes radiactivas para la industria, pero dada la antigüedad, ya no es radiactiva", dijo el Secretario del Directorio de la Autoridad Regulatoria Nuclear, Antonio Oliveira.

Oliveira afirmó que "la sustancia pasó a ser un trozo de metal, no tiene ningún riesgo", explicó después del análisis que se realizó sobre el producto contenido en el envase encontrado poco después de las 10.30, en la esquina de las calles Garibaldi y California, del barrio de La Boca.

"Lo que había en el contenedor era Iridio-190, pero por el tiempo que transcurrió, perdió su condición de toxicidad", expresó el representante del organismo que tiene a su cargo el control de la actividad nuclear en la Argentina.

En ese sentido, afirmó que el Iridio-190 "es utilizado por las empresas que hacen radiografías industriales, que estudian estructuras metálicas como las cañerías en empresas de destilerías, para ver su estado.

"Hace unos 25 años o más, alguna empresa habrá dejado el contenedor en guarda y apareció en estos días. No es habitual encontrar esto, el envase estaba precintado debidamente", afirmó Oliveira.

Minutos después de encontrado el envase, se hizo un vallado preventivo de 50 metros a la redonda, en un operativo conjunto entre la Policía Federal, Defensa Civil de la Ciudad de Buenos Aires y el SAME, hasta que los bomberos de la policía utilizaron equipos especiales para retirarlo.

Personal de la división Riesgo Químico de la Policía Federal había adelantado que se trataría de Iridio-190 que estaría vencido.

El vencimiento de la sustancia hizo presumir, en ese momento, que el contenido del bidón "no revestiría peligrosidad", había indicado Víctor Capilouto, director de Defensa Civil.

Ni bien se finalizó con el vallado, Capilouto dijo que "se comprobó que no hay fuga de la sustancia y por ende la división de riesgo químico lo retiró del lugar".

No obstante, se esperaba el resultado de los análisis que después dieron a conocer los especialistas de la Comisión Nacional de Energía Atómica (Conea), para determinar el grado de peligrosidad del fluido.

Los investigadores, a su vez, no descartaron la posibilidad de que el bidón se hubiese caído de algún camión o que alguna persona lo haya abandonado deliberadamente.