Biodiesel y algo más

Como consecuencia de la escalada de los precios del petróleo, la presión de los ecologistas por el efecto invernadero originado por los gases producto de la combustión y varios otros motivos entre los cuales también se cuenta el snobismo de quienes argumentan, apoyan iniciativas y participan en foros nacionales e internacionales entendiendo poco o nada desde el punto de vista técnico, cuando se ingresa la palabra BIODIESEL en Internet, aparecen más de 11 millones de citas de estudios, informes, etc. que contienen todo lo que a cualquier mortal interesado en el tema le puede ser de utilidad para ingresar al mundo del biodiesel.

Es así que en la web puede encontrarse el desarrollo de las reacciones químicas involucradas en el proceso de combinación de los aceites de soja, girasol, colza, palma y de otras fuentes de materia prima con alcoholes llamados etanol o butanol, la oferta llave en mano de plantas industriales para producir el biodiesel, los costos del producto, comparados con el gas-oil, los resultados que se alcanzan con los motores diesel que utilizan combustibles que contienen gas-oil con porcentajes de biodiesel que van del 5% al 100 %, la alharaca de quienes sostienen que al dedicar oleaginosas a la producción de combustibles faltarán alimentos para los sectores de menores recursos , los infaltables reparos que ponen los recaudadores de impuestos, que ya están elucubrando las medidas para que el biodiesel no escape de sus garras y así sucesivamente el tema tiene un tratamiento mas que amplio en la web.

Debo reconocer que, obviamente, he revisado solo una cierta cantidad de los sitios en los que se toca el tema, pero en ningún caso encontré referencia a lo que sucintamente voy a comentar. Se trata de la producción de oleaginosas con destino a la elaboración del aceite que luego se transformará en biodiesel. El cultivo de una especie vegetal no puede repetirse indefinidamente sobre la misma superficie, máxime en el caso de las oleaginosas. Este concepto (monocultivo) desde siempre deja paso a lo que se denomina “rotaciones”, es decir que sobre una cierta superficie cultivable, quien decide qué cultivo sucede al que se cosecha tiene que estar en condiciones de cambiar de especie para evitar los efectos perniciosos (en el plazo inmediato) que originaría eso que llamamos monocultivo.

Como consecuencia de las condiciones ecológicas favorables de nuestra pampa húmeda (lluvias, temperaturas máximas y minimas,etc) anualmente se siembran y cosechan unos 20 millones de hectáreas con las oleaginosas que mencionamos al principio. Los enormes adelantos en genética vegetal nos permite disponer de variedades con condiciones espectaculares en lo que hace a producción y resistencia a enfermedades , hace posible llevar a cabo anualmente dos cultivos sobre la misma superficie y en general, todo se maneja con un nivel tecnológico que resulta envidiable para todos los países del mundo .Es así que si se construyera una cierta cantidad de plantas elaboradoras de biodiesel, la materia prima procedería todos los años de diferentes lugares, toda vez que todos los productores agropecuarios saben y respetan lo de las rotaciones .El mercado de las oleaginosas es amplio, de manera que no existirían mayores problemas.

Distinto es el caso de las zonas áridas como Rió Negro y Neuquén. Nuestra producción es por completo de fruta y viña y no existe producción de cereales ni de oleaginosas. Por lo tanto, si quisiéramos incursionar en la producción de biodiesel (decisión que seria acertadísima) tenemos que pensar en lo de las rotaciones, de manera que por cada hectárea cuyo producido destinaremos a la producción de biodiesel tendremos que mantener en cultivo otras 5 o 6 hectáreas con alfalfa, maíz, trigo, etc. siguiendo el ciclo de las rotaciones que los técnicos aconsejarán.

Como hacemos a producir vegetales en un lugar donde no llueve? La respuesta está en los labios de todos: SE RIEGA Y YA ESTÁ. Claro, pero cuando conocemos algo del tema, tenemos conciencia de que la cosa no es tan simple. Para regar los diferentes cultivos que integran nuestras rotaciones, con respeto absoluto por la conservación del suelo y para que el programa sea posible de ejecutar, no existe otra alternativa que recurrir a los modernos equipos de riego por pivote central, cada uno de los cuales puede regar 50- 100- 500 ha. De agua disponemos, de tierras aptas también, pero lo que se necesitan son inversiones importantes que corresponden a los equipos de riego, tractores y maquinas, instalaciones para conservación de cereales y oleaginosas, capital circulante para movilizar la producción, compra de hacienda, plantas para transformar los residuos de la fabricación de biodiesel y axial podríamos hacer un listado que cubriera todas las necesidades en equipos, instalaciones y capital necesario. En pocas palabras: cuando se habla de biodiesel hay que pensar en muchas cosas más.

A esta altura, ya podemos hacer algunos números: la producción de aceite que se logra por hectárea cultivada con oleaginosas ronda los 500 litros. Si este aceite se empleara en una proporción del 50 % en el combustible diesel, con el producido de una hectárea podríamos lograr 1000 litros de combustible. La Norpatagonia consume anualmente unos 100.000 m3 de gas-oil, o sea que deberíamos contar todos los años con 50.000 m3 de aceite vegetal; si podemos producir 500 litros por hectárea, necesitaremos cultivar, todos los años, 100.000 ha con oleaginosas. Pero atención: recordemos que por cada hectárea con oleaginosas, estaremos haciendo una rotación con unas 4 o 5 hectáreas con cereales, alfalfa, ganadería, etc. y esto hace que para contar con el biodiesel necesario para cubrir una parte de las necesidades de la región, se estén trabajando cerca de 500.000 ha. Asombroso, no?

Vemos así que más allá de la exactitud de los números dados, la decisión de producir biodiesel crea la necesidad de poner en cultivo nuevas áreas productivas con todo lo que esto trae aparejado. Esto se denomina DESARROLLO y sus consecuencias son imprevisibles por lo positivo que resulta para los grupos económicos y para la región que lo lleva a cabo. Podríamos decir que gracias a la producción del biodiesel nos autoabasteceríamos de cereales, papas, carne, etc. que en este momento nos llegan desde mas de 1000 km de distancia…

Por: Ing. Agr. Eduardo D. Destaillats
Miembro del Círculo Argentino de Periodistas Agrarios